lunes, 13 de junio de 2011

PARÉNTESIS.

Por unos días, dejé atrás China, Shanghai, la contaminación, el ruido, mi burra y todo lo demás, para irme a Asturias a reponer fuerzas. Una de las cosas q dejé atrás y que no quiero dejar de contaros, fue que tengo a la ayi (la señora q viene a limpiar la oficina) sublevada e indignada. Claro, si es que con todas estas "nuevas regulaciones y normas" (como ella mismo las llamó) que he metido, tengo a la mujer de morros desde la semana antes de irme a Oviedo.

Y es q a quién se le ocurre más q a la extranjera de turno, pedirle que por favor de ahora en adelante no vuelva a limpiase los pies en el fregadero de la cocina ("es q me mancho los pies limpiando la oficina con las chanclas y el agua de baño sale muy fría!"), o enseñarle dónde está guardado el papel higiénico que tenemos de repuesto en la oficina, para q cuando se acabe en el baño, lo reponga... para mi sorpresa, en este segundo caso resulta que según el criterio de esta buena señora, lo de reponer el papel higiénico en el baño de mujeres no entra dentro de sus tareas, ya que nunca lo hizo hasta ahora ni antes se le pedía... cuando me incorpore mañana sabré si mis técnicas de persuasión antes de irme funcionaron. "¿Y qué técnicas de persuasión son ésas a las q te refieres?", pues nada, básicamente después de tener un quasi-conflicto internacional en la oficina por la falta del papel de las narices -no de las narices precisamente, jjajaj- durante un tiempo, y tras comprobar que si no se había repuesto aún teniendo más de 30 rollos de reserva no fue xq la ayi no supiera dónde estaba, sino xq no le salía del mismo sitio que se limpia con el papel de marras hacerlo, decidí que además de echarme unas risas por lo absurdo de la situación, y después de intentar razonar con ella y explicárselo, seguía de morros, sin hacerlo y refunfuñando por lo bajo, no me dejaba muchas opciones: "muy bien, no se preocupe; piénselo unos días y dígame finalmente qué decidió ya que si considera que no es su trabajo reponer el papel higiénico del baño de mujeres -sólo del de hombres-, entonces su trabajo no será ni este ni ninguna otra tarea en esta oficina, ya que no me quedará más remedio que buscar a alguien que esté de acuerdo en hacerlo, junto con el resto de tareas que hace habitualmente".

Dicho y hecho: al menos el día q me fui quedaron tres rollos en nuestro baño!
No me pongáis ésa cara ya que se lo intenté explicar antes y hasta las chicas chinas de mi oficina entendían que lo que le pedía no se salía del "ámbito de su actuación"; reconozco que la pobre mujer dio en el clavo sin saberlo: como vuelva a escuchar otra vez "esto no es mi trabajo", van a saber lo q sí es mi trabajo de verdad: decidir a quién quiero en el equipo!

Dejando atrás los problemillas domésticos una vez más, me fui a Asturias en lo que pretendía ser una semana de playa, baños en el Cantábrico, bocadillos caseros y helados al final del día. A veces se me olvida de dónde vengo... la playa la pisé dos días: el que llegué, que me fui directamente desde el aeropuerto con el bikini en el bolso x si me perdían la maleta, y al día siguiente. El resto de la semana se la pasó lloviendo y encima hacía frío, por lo que la siesta del jueves en Luanco con forro polar -llamadme quisquillosa si queréis- no cuenta como día de playa a estos efectos. Menos mal q nos queda la comida, que nunca falla, la sidra, q no falló, las persianas, q me permitieron batir mi récord desde enero en horas de sueño seguidas y algún que otro amiguete y pariente a los q me dio tiempo a ver o hablar por teléfono, ¡menos da una piedra!



La excursión la rematé el viernes volando a París con mi madre, ya que el enlace del sábado era malísimo y xa pasarme 13 horas tirada en el aeropuerto, decidí q mejor me las pasaba pateando por París: mi colesterol me agradece haber vuelto a China xq no hay esquina de esa ciudad q no huela a gloria! q si un crêpe aqui, que si un petit brioche au chocolat allá, que si un peu de fromage no sé dónde... Air France le puso la guinda al pastel: cuando fui a facturar una amable señorita me informó de que me regalaban un día más de vacaciones más una generosa indemnización por hacerme esperar a comer noodles en Shanghai a la vuelta, ejem, perdón, quería decir q me cancelaron el vuelo hasta el domingo por la noche... :D

Merci beaucoup!

1 comentario:

fakinasjol dijo...

¡Un peu de fromage! Debe de ser el único tipo de peu que no me sale. ¿En qué consiste eso?, que si te gustan voy practicando...