Si pensasteis q ayer lo habíais visto todo, aqui os dejo la 2º entrega de la serie, tal y como prometí...
A propósito del tema, y dado que mi burra levanta mucho interés entre vosotros y pasiones entre los q han posido probarla, deciros que hace un par de días tuve q someterla a una operación de urgencia; dos findes seguidos llenos de emociones, le pasan factura a cualquiera: en mi caso, pasarme los tres primeros días de la semana yéndome a la cama con los Lunnies, y en el suyo, su batería dejó de latir... Efectivamente, tras unas 14 horas cargando, a la mañana siguiente no tenía fuerzas casi ni para moverse del sitio, así q cd volví a casa por la tarde, la llevé al puestuco de la esquina dispuesta a no moverme de su lado hasta q me la devolvieran en perfecto estado. Tras una conversación a tres entre el chino del puesto, una chica de mi oficina haciendo de traductora por el móvil y yo describiendo maternalmente los síntomas, conseguimos llegar a la conclusión de q la batería ya no daba más de sí, así q allí me planté, sentada en una banqueta q se levantaba del suelo unos 30 cms., integrada entre todo el lío de cables, herramientas, tubos, cadenas, y mierdas indescriptibles, y otro cliente empeñado en darme conversación, armada de paciencia como una china más, viendo pasar el tiempo en actitud totamente contemplativa.
Hora y media y unos 30 € más tarde, x fin conseguí meter la llave y salir de allí cortando el viento como en los mejores tiempos de recién comprada. ¡Si es q mi burra no tiene precio!
1 comentario:
supongo que como buena china, esperarías de cuclillas.... ajjaja!! por cierto, creí que tu burra era una bici, no una moto... :S qué desilusión!!
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